Nota Enviada Al Platanero RD.- Madrid- España.- Este escrito que realizo es para informar a los medios de comunicación y a nuestras autoridades públicas de nuestro país de los abusos que sufren sus ciudadanos que estamos fuera, por medio de ciertas personas de rango, que supuestamente nos representan fuera, en el caso de mi familia el consulado dominicano en Madrid y sus representantes.
En el 2004 se abrió un plan de seguro de repatriación en el consulado dominicano (plan de ayuda mutua), por el cónsul de esa época el señor Marcos Cross Sánchez, el cual empezó funcionando bastante bien y por ello decidimos en mi familia inscribirnos el 22 de febrero de 2005, éramos cinco personas y por ello pagábamos una cuota de 180 euros por año a pesar de la crisis económica que asola España hasta la actualidad, año por año, hemos pagado nuestra cuota de seguro sin fallar.
El 12 de julio, de este mismo año lamentablemente perdimos un ser de máxima importancia en mi familia como mi abuelo el señor RICARDO RAMÍREZ. Cuando fuimos avisar al consulado del fallecimiento de mi abuelo para que nos resuelvan el tema de la repatriación, la preparación del cadáver y los gastos funerarios, entre otras prestaciones que dice la publicidad del seguro, nos informaron que a mi abuelo lo habían sacado del seguro por ser muy viejo.
Uno de los asistentes del señor consul, el señor PEDRO CASTILLO, nos tiro los papeles prácticamente en la cara y nos hacía miradas desafiantes… a pesar del dolor, la conmoción y el no entender nada de lo que estaba pasando, llamo al actual cónsul el señor JUAN CUEVAS que accedió a hablar con mi madre y conmigo y el cual nos mostró una carta que nos enviarían en esa misma semana diciendo que nos devolverían la cuota del seguro que habían cobrado en el mes de mayo, porque el seguro del consulado había rechazado a mi abuelo por ser muy viejo, de esta forma vulnerando y quitándonos nuestros derechos, cuando mi abuelo estaba inscrito desde el 2005 en el dichoso seguro.
Bajo muchas luchas, lágrimas y una llamada a la cancillería en la Republica dominicana, dijo el señor cónsul que por humanidad (como si estuviésemos pidiendo limosnas y no tuviésemos nuestros derechos como contratantes de un seguro), accedería a pagar los gastos funerarios y la repatriación, pero que no pagaría el billete del familiar que debía acompañar el cadáver, ni los demás gastos ni nada de lo que dice la propaganda del seguro. De esta forma termina de humillarnos aun más y pisotearnos, volvimos a llamar a la cancillería y solo así accedió al pago del billete del familiar que acompañaría el cadáver.
En la funeraria que velamos a mi abuelo aquí en Madrid, el consulado no nos puso ni agua para brindarle a los familiares ni servilletas para secarnos nuestras lágrimas, llame al consulado para quejarme del trato y de ese acto y me colgaron el teléfono varias veces sin tener respeto de unos ciudadanos que estaban pasando por una mala situación como es la pérdida de un familiar.
Junto al cadáver de mi abuelo iban otros cuerpos, como el cadáver de la señora Ana Pie que duro un mes en un congelador para así poder ser repatriada (indignante pero al parecer tenemos que callar, no tenemos derechos, ni nadie que dé la cara por nosotros…), por esos cadáveres, iba en representación del consulado la señora MARIA DE LA CRUZ, la cual en pleno vuelo nos dijo a mi madre y a mí en modo de burla que nos haríamos famosa por que la prensa estaría presente por nuestro caso, cuando realmente a nosotras nos importaba darle cristiana sepultura a los restos de mi abuelo.
Pero aquí no termina el show, la señora María de la cruz no nos ayudó en aduanas, ni en la morgue a reconocer el cadáver, ni nos informó del servicio de traslado que existe para trasladar a los fallecidos a sus ciudades de origen en el país, tuvo el señor Marcos Cross que ayudarnos a sacar el cadáver y nos proporcionó ayuda para llevar el cuerpo hasta Barahona (aún hay políticos humanos).
Por último, por casualidad del destino, mi madre MERCEDES RAMIREZ ROA, que tiene familia en la localidad de conuquito (Barahona), se encontró con el señor cónsul JUAN CUEVAS y le toco el tema, este señor con toda su prepotencia que le caracteriza, dijo que no le daría nada del dinero que le corresponde por ley, y que no le importaba que lo demandara porque el daba 500 o 600 euros por abajo y ese caso se quedaría impune…de este modo concluye diciéndole a mi madre, que todos esos problemas que hay en el consulado actualmente se deben a la gestión que tuvo el señor MARCOS CROSS cuando era cónsul y que lo demandaría porque supuestamente él era el que nos estaba asesorando. He de decir que el señor MARCOS CROSS con toda su amabilidad, nos proporcionó su ayuda incondicional como buen ser humano que es y que se involucra en el dolor ajeno, al cual mi madre y yo estamos muy agradecidas, no tiene nada que ver con mi publicación ni con la demanda que he formulado, pues soy mayor de edad, se lo que hago y tengo conocimientos jurídicos suficientes para saber que lo que se nos ha hecho ha sido un atropello.
Yo solo quiero que se haga justicia, que nos den lo que nos corresponde, merecemos una disculpa pública y también que el dominicano que está pagando ese seguro que sepa que no tiene nada porque siempre hay problemas de este tipo en el consulado de Madrid.
ATT: GENESIS LISBETH FELIZ RAMIREZ.
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